jueves, 12 de abril de 2007

Promesas electorales

Desde que tengo la opción de votar siempre lo hice (y siempre al mismo partido).
No es que estuviera al 100% de acuerdo, pero era el que más se acercaba a mis ideas. Pero ahora...tengo serias dudas acerca de mi voto en las próximas elecciones. No es que tenga que elegir entre una opción buena y otra mala...es que ahora siento, más que nunca, que tengo que elegir entre una mala y otra peor (no se me ofendan los de otros partidos, pero prefiero hablar de los que tienen más posibilidades de ser elegidos).

Quién viva en Madrid sabe cuál es el proyecto de Gallardón. Si es reelegido, seguirán las obras faraónicas (que una vez terminadas, pues no están tan mal), los parquímetros, Ana Botella, la privatización de ciertos servicios municipales...O sea, más de lo mismo de los últimos cuatro años.

Luego tenemos al "aspirante al título", Miguel Sebastián. Sebastián me ha prometido que si le voto la Gran Vía será peatonal, habrá WIFI gratuito en distintos puntos de Madrid (incluidos algunos parques), un aire más limpio, viviendas en alquiler para los jóvenes por unos 300 euros, transporte gratuito para los menores de 21 años, tranvía en la zona Este de Madrid y ¡hasta playa!.

De todas las propuestas, la más realista (y necesaria) es la de los alquileres a bajo precio. Si la EMV no fuera la casa de putas que es y hubiera más control, es algo que se podía haber hecho hace mucho tiempo.

Respecto al resto...¿no hay cosas más importantes que solucionar en mi ciudad que dotar de WIFI a las zonas públicas? ¿O hacer una playa? ¿Es más importante el derecho al acceso a internet gratuito que otros derechos como son la vivienda, la educación o la integridad físicad? Para hacer estos programas, ¿se necesita dejar el sentido común aparcado? Por ejemplo, el WIFI. Digo yo, ¿no sería mejor dotar a las bibliotecas (y abrir más) y a los centros sociales de puestos de internet? ¿O nos van a regalar un portátil a cada hogar? Y si es por los turistas, sí, queda muy fardón que se sienten en un parque con el portátil...si no se lo han robado antes.

Y mi duda principal, ¿quién lo paga?
Es que gratis (y con matices) es el aire, la luz del sol, una sonrisa...Lo demás tiene un coste y me pregunto de dónde va a salir.
Si se deja de ingresar el dinero de los abonos transporte de los menores de 21 años, más el dinero que se deja de ingresar de los parquímetros y las necesidades de transporte público (y de otros servicios públicos) de Madrid son cada vez mayores....a mí no me salen las cuentas.

Supongo que es fácil prometer algo si sabes que no hay consecuencias por su incumplimiento. Cuando los ciudadanos protesten (si lo hacemos, que nos las dejamos meter dobladas) saldrán con frases como "la coyuntura actual impide esta actuación" o "heredamos una situación de nuestros predecesores que nos impide..." y a seguir "trabajando por los ciudadanos". (Si yo fuera a una entrevista de trabajo, le prometiera "el oro y el moro" a mis empleadores, no cumpliera (y echara la culpa a mi predecesor), me pregunto cuanto tardaría en estar de patitas en la calle. Y ni hablar que me volvieran a admitir...)

Si lo prometido es deuda (como oía tanto a los políticos cuando era pequeña), ¿dónde y cuándo nos vamos a cobrar todo lo que nos deben?

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Ruiz-Faráon dejará una ciudad muy "divina" para los que tengan dinero. Para el resto, tendrán que conformarse con vivir en otras ciudades.
Y el aspirante, ¿para qué va a hacer playa en Madrid? Si sólo hay que ir a Alicante un fin de semana para ver a medio Madrid allí metido.
Quién lo va a pagar...Pues los de siempre: tú, yo, el vecino. Eso sí, seguramente lo de disfrutarlo, no nos toque (a mí seguro que no, que me voy de aquí).
Y mujer, no son trabajadores, son políticos, que son cosas distintas.
Veo que has cambiado los colores de la pared de la bodeguita. Me gusta.
Un beso y buen fin de semana

Vitore dijo...

Creo que una de las propuestas de Alberto Ruiz Gallardón para la ciudad de Madrid es volver a poner la M30 donde estaba y en los túneles hacer un jardín subterráneo y a la siguiente legislatura al revés y así para siempre.

Besos.

Silvia dijo...

Vito, es que el día que en Madrid acaben las obras, será el comienzo del fin del mundo y Ruiz-Faraón trata de evitarlo.
Besos

Anónimo dijo...

A mí Madrid no me toca, aunque viva aquí, pero como no duermo... pues nada. Pero eso no me quita el derecho a opinar, no?
Ruíz-Faraon (qué gracia, no lo había escuchado), uf, miedo me da. Aunque igual si en vez de escuchar obras escucho el canto de los pájaros, me siento mal y me mudo, who knows?

en cuanto al otro, poca publicidad se está haciendo, ruido poco, posiblemente tres cuartas partes de la población madrileña ni le conozca. Está haciendo una campaña muy "suave". Pero oye, que me ha encantado lo del WIFI. Porque realmente lo que todo el mundo quiere es irse con su portátil al parque. Ya no hay excusa para salir pronto de la oficina. "Oye, jefe, que hace buen día, casí que me voy al parque, a tomar el solecito, pero no se preocupe usted, que estoy conectado y sigo currando, así que los informes que me pidió para mañana, los tendrá, pero en lugar de invernar entre cuatro paredes, lo haré al aire libre". No decían lo de conciliar trabajo con vida personal? Qué mejor que un WIFI en los parques.

Ains... dónde vamos a parar.

De las casas, mejor ni digo.

Besiños
Chus

Silvia dijo...

¿Tú crees que se iba a trabajar mucho así?
El parque está para disfrutarlo, tomar el sol, dar un paseo...no para sentarse con un portátil a currar. ¿Qué te dieran un balonazo se consideraría entonces accidente laboral?
Besos

Silvia dijo...

Ah, lo de Ruiz-Faraón no sé si lo usará más gente, pero es como le llamamos Fran y yo desde hace años.
Aparte de una teoría que nos sacamos (con unas cuántas copas de más en el cuerpo) acerca del fin del mundo y las obras de Madrid (que ambos estábamos convencidos que el Megido de la Biblia en realidad es una errata y en realidad hablan de Magerit).
Besos