martes, 8 de febrero de 2005

Borde

Ayer tuve una conversación con unos amigos que decían que últimamente estaba un poco borde. Yo contesté que no creía que estuviera especialmente borde con nadie y me fui la cama. Pero claro, yo no sería yo si no le diera mil vueltas a las cosas y la noche siempre ha sido mi cómplice en estos menesteres.
Así que son casi las 5 de la madrugada y aquí estoy yo analizando las conversaciones que he tenido con ellos en los últimos meses.
Y sigo sin verme borde. Distante, sí, pero no borde (se nota especialmente, saco lo peor de mí).
Así que esa parte de mi que es una mosca cojonera empieza a preguntar.
¿Por qué esa distancia? Porque hay momentos en los que no me siento cómoda con esas personas.
¿Y esa incomodidad? Pues no sé decir exactamente en que consiste, son una serie de sensaciones, que están ahí y tengo que analizarlas. Lo que sé es que cuando esto me pasa, es mejor poner distancia de por medio, pensar sobre el tema y esperar a que se me pase.
¿Y si no se te pasa? (Tengo sueño y empiezo a estar un poco harta de esta parte de mí tan preguntona) Pues hablo con las personas afectadas a ver si llegamos a un punto común.
¿Y si no llegas a ese punto común? Pues es una lástima, porque son personas a las que quiero y no me gustaría perderlas.
Pero tú y yo nos conocemos bien (llevamos casi 30 años compartiendo el mismo cuerpo) y sabes que eso no suele pasar. Cuando me dan las neuras, es mejor dejarme a mi aire.
¿Sabes que siempre dijeron que estabas un poco loca? Puff, no me extraña después de leer esto, yo también lo digo. Y ahora, vete y déjame dormir un poquito.

Esta es la transcripción de la ida de olla de esta noche. A los afectados que les haya podido molestar, dañar u ofender mi comportamiento, les pido que me disculpen.
Ahora voy a seguir trabajando, ante de que mi "yo" más responsable me de un capón.

No hay comentarios: